Desembala el nuevo cartucho, y tira de la pestaña rosa que ayuda a quitar la cinta de plástico que lo recubre. Esta cinta no se debe volver a colocar en los cartuchos, esto puede generar problemas futuros en la impresión.
Coge el cartucho por los laterales, con los inyectores direccionados hacia la impresora y seguidamente colócalos en su respectivo lugar. Ten en cuenta, que el cartucho tricolor que se diferencia por el color rosa de uno de sus laterales va en el lado izquierdo, mientras que el cartucho negro va a la derecha. Para poder insertarlos, empuja los cartuchos hacia dentro, hasta que estos queden encajados, y asegúrate de que están correctamente.
Cuando los cartuchos ya estén colocados, cierra la puerta de acceso a los cartuchos, y espera unos segundos para comprobar que se ha realizado bien.
En unos 30 segundos, aproximadamente, se imprimirá una página de forma automática, que será donde puedas comprobar que la alineación es correcta.
El segundo paso consiste en alinear los cartuchos.
Para ello, levanta la tapa del escáner y coloca la página que se ha imprimido previamente con la cara impresa hacia abajo, pegada a la esquina derecha del cristal del escáner, no será difícil saber cuál es, pues está marcado con un triángulo pequeño de color blanco, que indica la posición.
A continuación, cierra la tapa del escáner y clica el botón con el cual se hacen las copias en negro. Esto hará que se empiece a escanear, y ayudará a que la impresora alinee los cartuchos de forma automática.
Espera a que la luz de encendido deje de parpadear.
¡Enhorabuena! Eso significa que la alineación de los cartuchos ya ha finalizado, y de forma correcta.